El cáncer de ovario es un grupo de enfermedades que se originan en los ovarios o en las áreas vinculadas de las trompas de Falopio y el peritoneo.
En esta patología, las células se multiplican rápidamente y pueden invadir y destruir tejidos sanos del cuerpo. Se estima que cada año se diagnostica cáncer de ovario a 300 mil personas en el mundo. En Chile, es la novena causa de muerte en las mujeres, las cifras de Globocan dan cuenta que al año fallecen 549 chilenas por esta enfermedad, lo que se traduce en que mueren alrededor de dos mujeres al día como consecuencia de este cáncer femenino.
¿Qué tipos de cáncer de ovario hay?
- El cáncer de trompa de Falopio: éste se forma en el tejido que recubre una trompa de Falopio.
- El cáncer peritoneal primario: Es el cual se forma en el tejido que recubre el peritoneo, un revestimiento de tejido que cubre los órganos en el abdomen.
Ambos tipos de cáncer son similares al de ovario y tienen los mismos tratamientos. Por ello, algunos expertos médicos también los consideran un cáncer de ovario.
¿Cuál es el grupo de riesgo que tiene más probabilidades de padecerlo?
Es cierto que hay personas que tienen más probabilidades de tener cáncer de ovario. Incluyen aquellas que:
– Tienen antecedentes familiares de cáncer de ovario en una madre, hija o hermana
– Tienen cambios hereditarios en los genes BRCA1 o BRCA2
– Tienen ciertas afecciones genéticas, como el síndrome de Lynch
– Tienen endometriosis
– Tomaron terapia de reemplazo hormonal
– Tienen sobrepeso u obesidad
– Son mayores, especialmente quienes han pasado por la menopausia
A continuación, te dejamos los principales síntomas producto del cáncer de ovarios. Estos son variados y pueden ser parecidos a los de otras enfermedades.
– Dolor en el abdomen, la espalda o el área pélvica
– Hinchazón del área pélvica baja o del abdomen. Puede que tu ropa se sienta más apretada alrededor de tu cintura
– Dificultad para comer porque te llenas muy rápidamente (después de sólo unos bocados), o tienes falta de apetito
– Dolor durante las relaciones sexuales
– Necesidad de orinar con mayor frecuencia
– Cansancio, más fuerte o más frecuente de lo que es normal para ti
– Problemas estomacales, incluyendo estreñimiento, diarrea, acidez, urgencia o dolor al defecar
– Cambios en tu ciclo menstrual, incluyendo tener sangrado entre periodos
En cuanto a la prevención de este tipo de cáncer, no existe una forma segura y certera de hacerlo, pero sí hay maneras de reducir el riesgo. Es importante, considerar la posibilidad de tomar píldoras anticonceptivas. Consulta con tu médico, ya que tomar estas píldoras disminuye el riesgo de cáncer de ovario, pero tiene otras contraindicaciones, por lo que es necesario analizar los pros y contras en función de tu situación.
Por otra parte, es de suma importancia hablar con un médico acerca de tus factores de riesgo. Si tienes antecedentes familiares de cáncer mamario y de ovario, cuéntale al especialista. Esta información puede ser determinante para evaluar tu riesgo de tener cáncer.