Trastornos del sueño

No dormir lo suficiente puede afectar todas las áreas de tu vida y causarte serios problemas de salud. Muchas personas, sobre todo adultos, reportan tener dificultad para conciliar el sueño. Afecciones que van desde el insomnio, pasando por la apnea del sueño, hasta los movimientos típicos de dar vueltas en la cama, al menos una o más noches a la semana. 

Dormir bien durante la noche es algo fundamental para la salud general y el bienestar mental. Si no se descansa lo suficiente, todos somos más susceptibles a sufrir una serie de enfermedades y afecciones crónicas, como diabetes, enfermedades cardiovasculares, obesidad y depresión.

Sin embargo, una pregunta recurrente es: ¿cuánto se debe dormir para descansar lo suficiente? Esto varía según el individuo y cambia a medida que una persona envejece. Una buena guía es de 7 a 9 horas todas las noches. Por su parte, los bebés generalmente duermen unas 16 horas diarias. Los niños pequeños necesitan unas 10 horas, mientras que los adolescentes, al menos, 9 horas. Para lograr el máximo de los beneficios restauradores del sueño, es importante completar una noche de descanso de calidad.

Aunque es fundamental un buen dormir para nuestra salud, existen una serie de elementos, alimentos o situaciones distractoras que pueden interrumpir el sueño. Estimulantes tales como la cafeína o algunos medicamentos pueden mantenerte activo. También las distracciones como aparatos electrónicos (en especial la luz de televisores, teléfonos celulares o tablets) pueden evitar que uno logre conciliar el sueño de una mejor manera. También, las personas que padecen insomnio tienen problemas para quedarse dormidos o permanecer dormidos. Por lo general, la ansiedad por querer dormirse empeora la situación.

A continuación te dejamos 6 tips para dormir mejor:

  • Entra en una rutina. Intente irse a la cama aproximadamente a la misma hora todas las noches, incluso los fines de semana, y trate de levantarse a la misma hora cada mañana. Así, acostumbrarás al cuerpo a dormir en tiempos determinados.

  • Crea un ambiente de descanso. Mantén tu habitación fresca, oscura y silenciosa. La exposición a la luz durante la noche podría hacer más difícil que te duermas. Prueba usar cortinas oscurecedoras, tapones para los oídos, un ventilador u otros dispositivos para crear un ambiente acorde a tus necesidades.

  • Realiza actividad física como parte de tu rutina diaria. La actividad física regular puede promover un sueño mejor. Sin embargo, evita hacer actividad demasiado cerca de la hora de acostarte, esto debido a que el cuerpo se puede activar más que relajarse para dormir.

  • Sigue un horario de sueño. Dedica no más de ocho horas a dormir. La cantidad de sueño recomendada para un adulto sano es de siete horas, como mínimo. La mayoría de las personas no necesitan dormir más de ocho horas para descansar bien. La constancia refuerza el ciclo de sueño-vigilia del cuerpo.

  • Tómate el tiempo para relajarte. Es importante evitar la televisión y el tiempo de la computadora hasta una hora antes de irse a la cama. En su lugar, usa el tiempo para relajarte. Puede ser con música suave o descargar sonidos de la naturaleza como la lluvia o las olas del océano. Tomar un baño caliente antes de acostarse también puede ayudar al relajo.

  • Comer y beber ligeramente. Evita las comidas pesadas y el exceso de líquidos demasiado cerca de la hora de dormir. Tu cuerpo tiene que trabajar horas extras para digerir una comida pesada, que puede impedirte dormir tranquilamente. Y demasiados líquidos cerca de la hora de acostarse, pueden interrumpir tu sueño con visitas adicionales al baño durante la noche.

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